Desde que Jorge Valdivia puso nuevamente un pie en el Estadio Monumental, todas las miradas se posaron sobre él. Apostados en Marathón 5.300, los fanáticos aguardan por horas la salida de los jugadores, pero especialmente por la del Mago. Porque es de la casa, nació en Colo Colo, y está de regreso.

Si bien el comienzo del equipo no fue bueno, con una derrota ante Deportes La Serena por Copa Chile, todo se arregló en la final de la Supercopa. Valdivia volvía oficialmente a vestir la camiseta del “Popular”, las expectativas eran muchas, y el 10 no desentonó. Fue uno de los grandes artífices del triunfo y levantó de entradita un título.

¿Qué sensación te deja haber jugado tu primer partido oficial, que haya sido un clásico, y ganes el título de la Supercopa?

“Las sensaciones son positivas, por todo lo que significó el final del partido. Siempre es difícil jugar un clásico y, mucho más, ganarlo de la forma en que lo hicimos. Y mejor aún, si ese triunfo te significa ser campeón. Siento mucha felicidad por cómo fue y de poder decir: misión cumplida”.

¿Pensaste que iba a haber tanta diferencia en el marcador?

“Me imagino que nadie piensa que en una final, y un clásico, se va a dar una diferencia como la que se dio. Pero cuando te generas muchas ocasiones de gol, y de esas logras convertir varias, evidentemente puede pasar. Es raro que se dé un 4 a 1 en una definición así, pero creo que es producto del trabajo que estamos haciendo”

¿Cómo ves al plantel para el inicio del torneo ante Antofagasta?

“Venimos trabajando con la misma humildad, alegría y ganas de comenzar bien. Haber podido ser campeón una semana antes del inicio del torneo nos da una confianza moral para lo que será el debut. Haber perdido hubiese sido complicado, porque te queda dando vuelta en la cabeza que no pudiste ser campeón. Como lo logramos, hemos podido trabajar de una manera distinta esta semana”.

Considerando lo hecho el torneo anterior ¿Sienten la presión de tener que ser campeones?

“No creo que por lo que haya pasado el torneo anterior tengamos que sentir una presión extra. Soy de los que piensa que estar aquí ya es sinónimo de presión. Siempre tenemos que estar luchando por ser campeones, independiente si vienes de conquistar un título o de perderlo, el hecho de estar en esta institución de nivel mundial ya te hace saber que debes ganar siempre. Esperemos que eso se traduzca en algo positivo, y que aprendamos de esa presión”.

¿Cómo te sientes físicamente para este torneo?

“Me vengo sintiendo mejor día a día. Imagino que con el pasar de los partidos tendré que ir mejorando más todavía. Vengo de una inactividad muy larga. El partido con Católica fue mi primer partido oficial después de mucho tiempo. Dejé de jugar en los Emiratos Árabes el 10 de mayo, así que espero ir mejorando mi nivel con los partidos, porque la única manera de mejorar es jugando”.

Si te lo pregunto ahora ¿Estás para jugar todos los partidos del campeonato?

“Eso se verá a medida que pasen los partidos. Yo no puedo asegurar que jugaré diez, quince, veinte partidos, si al quinto los resultados de todos los exámenes médicos que te hacen acá dicen lo contrario. Por eso, se irá viendo de a poco mi condición. Pero sí quiero estar en todos”.

Se te ve más liviano en la cancha ¿Qué es lo diferente que haces hoy para estar en forma?

“A medida que uno va teniendo más experiencia y más años en esta carrera, te das cuenta que tienes que mejorar en algunas cosas, como la alimentación y el descanso. Hace un tiempo vengo preocupándome de esos requisitos que a una cierta edad te ayudan a estar mejor. Pero no solo eso es lo que te va a tener bien. Son muchos componentes los que te permiten estar sano. La cabeza influye mucho en que uno rinda mejor. Espero que todo eso que estoy cuidando no quede solo en palabras y se demuestre a lo largo del semestre”.

Uno más al plantel

¿Cómo ha sido este período de adaptación con el equipo, cómo te recibió el plantel?

“Muy bueno. Creo que para mí ha sido fácil. Soy de la casa, tengo compañeros con los que ya he jugado anteriormente. Conozco a la mayoría de los funcionarios, sé lo que es Colo Colo, sé lo que significa estar aquí, el peso que tiene vestir esta camiseta, sé lo que tenemos que entregar en la cancha para que la hinchada siga teniendo esa admiración hacia uno. Así que mi reintegración al plantel ha sido totalmente positiva”.

¿Te sientes desde ya un líder dentro del camarín?

“Muchas veces eso va de la mano con el cariño y respeto que te tiene el resto de los jugadores. No saco nada con decir que soy un líder o un referente si no tengo su respeto ganado. Ellos día a día me demuestran que confían mucho en mí. Los jóvenes reciben bien una palabra de aliento porque, además, saben que uno ya lleva tiempo en esto. Mientras más líderes hayan, es mucho mejor para el plantel”.

¿Te sientes querido por ellos?

“No he visto ninguna situación que me demuestre lo contrario”.

El regreso a casa

¿Qué es lo que te motivó a volver a Colo Colo?

“Son muchas cosas, era ahora o nunca. Se habla mucho de la edad, antes de que yo volviera se hablaba de que no iba a rendir. Siento que aún puedo entregarle mucho a Colo Colo. Creo que tengo que demostrar mucho más y espero poder reflejarlo en el juego durante el semestre”.

¿Qué te da esta institución que no pueda darte otra?

“Tuve la opción de irme a otros equipos, en Brasil principalmente. Pero ninguno me daba la tranquilidad. Porque cuando uno va a un equipo nuevo tiene que empezar de cero siempre. Aquí, al volver a mi casa, no tenía que hacerlo. Porque aquí yo conozco la institución, entiendo lo que el hincha necesita, sé los deseos que tienen a nivel de dirigencia y cuerpo técnico cada uno, y creo que la primera opción siempre estuvo aquí. Colo Colo me vio nacer, me entregó mucho y me formó como jugador. Me siento como si nunca me hubiese ido de aquí. Por eso como familia decidimos volver a Chile”.

¿Ese conocimiento aporta en algo en tu juego?

“No. No tiene relación con el plano futbolístico. Porque me tengo que esforzar como todos y regirme por el reglamento del club como todos. Aquí no hay ventajas o privilegios como llegar a una hora distinta a entrenar. La diferencia solo pasa por un tema de adaptación y conocimiento más rápido que los demás. Pero por ser más grande tengo que entrenar mucho más, eso es ley, porque si no corro no voy a jugar”.

Falta mucho pero ¿Qué te provoca volver a jugar un clásico ante la U y tu amigo Jean Beausejour?

“Jean es mi amigo, nos conocemos hace mucho tiempo. Vamos a seguir siendo amigos, pero en el partido cada uno defiende los colores de su camiseta, eso se sabe. Nos entregaremos como los profesionales que somos, con la única diferencia que estaré enfrentando un amigo. Los clásicos son clásicos y lo único claro es que ganarlo te significará muchas cosas”.

No ha pasado mucho tiempo desde que terminó el Torneo Apertura de Fútbol Joven. Por lo que la imagen de los formados en Colo Colo levantando la copa aún está en la retina de muchos. A diferencia de otros años –donde la pelea del campeonato no se traducía en un título– cuatro de seis categorías se consagraron campeones: Sub 13, Sub 14, Sub 15 y Sub 19.

En la Sub 19, el camino fue bastante largo para poder llegar al título. Tras quedar en el segundo lugar de la Zona Norte con 40 puntos, tuvieron que enfrentar a O’Higgins  de Rancagua en semifinales. Los vencieron por la cuenta mínima y se instalaron en la final, donde debieron medirse ante Santiago Wanderers.

El partido tuvo toda la tensión característica de una final. Ambos equipos buscaron el gol pero no tuvieron la fineza necesaria para marcar, yéndose a los lanzamientos desde el punto penal. Ahí, el “Cacique” hizo valer toda su categoría y lo ganó por 4 goles a 3. Omar Carabalí, el portero, fue el encargado de decretar el tanto que les dio el título.

En la Sub 15, pese a que también se definió al campeón mediante los penales, la historia fue aún mejor. Los dirigidos por Luis Mena terminaron levantando la copa de manera invicta, con 19 triunfos y un empate.

Los albos, que finalizaron en la primera posición de la Zona Norte con 54 puntos, se metieron en semifinales y enfrentaron a Curicó Unido, a quienes vencieron por 3 goles a 1. Ya en la final, al igual que en la juvenil, el rival fue Santiago Wanderers. Venciéndolos por 5 a 4 desde los doce pasos.

En relación al triunfo, Mena comentó que “me siento orgulloso y contento de estar en esta institución y de tener un grupo tan lindo y maravilloso como el que tenemos. Fue un campeonato redondo”.

En la Sub 13, el equipo dirigido por Eduardo Rubio marcó amplia diferencia y consiguió el título con 51 puntos y 88 goles a favor. Mientras que la Sub 14, comandada por Christian Guzmán, hizo lo propio llegando a las 49 unidades.

A falta de una fecha del término de la Fase Regular del Campeonato de Apertura del 2006, Colo-Colo tenía asegurado su paso a los Playoffs. La campaña daba para ilusionarse, con trece triunfos, un empate y cuatro derrotas. Si bien era un equipo en formación, la escuadra de Claudio Borghi daba claras muestras de que estaba para grandes cosas.

Por el mismo hecho de tener abrochado el paso a la siguiente fase, el “Bichi” decidió enfrentar el duelo contra Antofagasta con varias figuras menos, como Claudio Bravo, Miguel Riffo, Arturo Vidal, Jorge Valdivia y Humberto Suazo. Sin embargo, plantel había de sobra y el equipo respondió con creces, logrando un triunfo que le aseguró el primer puesto en la tabla general.

Ante más de quince mil personas, el “Cacique” logró una cómoda victoria por 3 a 0. A los 22’, el colombiano Andrés González abrió la cuenta con un gran cabezazo, tras centro de Gonzalo Fierro. Con ese resultado, los equipos se fueron al descanso.

En el complemento, Colo-Colo salió decidido a cerrar rápido el partido. Y lo consiguió con anotación de Héctor Mancilla a los 58’, tras habilitación de José Luis Jerez. El tercero llegó a los 72’, luego que el golero nortino Luciano Pocrnjic derribara en el área a Fierro. Frente al balón se ubicaría Matías Fernández, quien con la calidad que lo convirtió en el mejor jugador del continente ese año, selló la goleada.

Tras ese partido, se vio parte de la mejor versión del “Popular”. Goleadas ante Unión Española en cuartos de final y categóricas victorias ante Universidad de Concepción en semifinales. Y por supuesto, la inolvidable final ganada en definición de penales a Universidad de Chile.

Después de dos meses de espera, el telón se vuelve a abrir en la Primera División y Colo Colo nuevamente irá por la gloria que le ha sido esquiva en los últimos torneos. Contra Antofagasta buscaremos iniciar de la mejor forma posible este Torneo de Transición para construir un camino que nos lleve a la cima del balompié nacional, un lugar del que nunca debe salir el equipo más ganador en la historia de Chile.

Este plantel viene con sed de revancha. El segundo lugar del Clausura pasado dejó un mal sabor de boca en Macul y ahora es el momento de retribuir la incondicionalidad de nuestros hinchas, que siempre han caminado junto a nosotros. Colo Colo no se conformará con otra cosa que no sea un nuevo título.

Para esto, la dirigencia del club hizo un gran esfuerzo por traer a los jugadores que necesitaba nuestro entrenador, Pablo Guede, para cumplir los objetivos trazados en este segundo semestre. Agustín Orión, Óscar Opazo, Nicolás Maturana y Jorge Valdivia ya han sumado minutos en la pretemporada, Copa Chile y Supercopa, encuentros que han servido para mostrar sus ganas de vestir nuestros colores.

Para el duelo contra el cuadro de la Segunda Región, llegamos con el mejor de los ánimos. El equipo viene de consagrarse como el campeón de campeones del fútbol chileno al golear a Universidad Católica por la Supercopa (Ver pág. 9) y el objetivo es seguir por el mismo sendero, demostrando que el trabajo realizado en La Serena y estas semanas en el Monumental va viento en popa.

Ahora comienzan siete días llenos de fútbol. Los Pumas serán el primer escollo que tendremos que enfrentar y la recuperación deberá ser rápida para enfrentar a La Serena en nuestro duelo pendiente en Copa Chile, para, posteriormente, confrontar a O’Higgins por la segunda fecha de la competición.

Guede es un técnico que ve el trabajo semanal para escoger el once titular que iniciará los respectivos duelos que tendrá el Cacique y fue claro en afirmar que sus decisiones “dependen del rival y las circunstancias, pero el sistema no se cambiará”. El adiestrador detalló también que Luis Pedro Figueroa y Andrés Vilches están contracturados y se les esperará hasta el último momento para ver si estarán ante Antofagasta.

En la Ruca debemos hacernos fuertes, transformándola en una verdadera fortaleza a la hora de recibir a los distintos equipos que vendrán a nuestra casa. Acá hay que hacerse respetar y buscaremos lograrlo desde un principio en el inicio del campeonato.

El fin de semana pasado se vivió una de esas jornadas que serán para recordar por mucho tiempo. Christofer Gonzales lanzaba un zurdazo en el que yacían las ilusiones de millones de colocolinos que en ese momento estaban con el corazón en la mano después de la igualdad de Everton en los descuentos. El empate no servía, pero la pasión y el empuje fueron más grandes, y a segundos del final, el pueblo albo terminó gritando a todo pulmón que Colo Colo era más puntero que nunca.

Este triunfo fue un paso agigantado al título del Campeonato de Clausura 2017. La 32 está cerca, hasta se puede llegar a ser campeón esta misma tarde (Ver nota Pág. 8), pero no hay que confiarse, quedan 180 minutos en disputa y relajarse no está permitido. Los jugadores y el entrenador lo saben; en el Estadio Monumental hay concentración máxima. 

Colo Colo se instala en la primera ubicación del torneo con 25 puntos frente a 24 de Universidad de Chile. La diferencia es mínima, pero dependemos solamente de nosotros, obteniendo las seis unidades que restan, el Cacique puede bajar una nueva estrella. “Tengo la convicción de que el domingo hay que hacer un gran partido para depender de nosotros”, reafirmó en la semana Pablo Guede. 

Con la baja de Mark González y la duda de Luis Pedro Figueroa, que será esperado hasta última hora, el Popular se enfrentará a Deportes Antofagasta, que viene de ganar por 4-2 a Deportes Iquique, dejándolo prácticamente fuera de la lucha por el trofeo mayor, cosa que también buscará en la Ruca. 

Sin embargo, en estos días se ha preparado un cotejo que el técnico sabe que será complicado, ya que los equipos se vienen a cerrar en Macul y sabe que esto puede amagar un buen resultado para el Eterno Campeón. “El domingo será bueno tener paciencia, empezando por nosotros dentro de la cancha, como las 40 mil personas que vendrán a apoyar”. 

Lo mismo piensa Álvaro Salazar, quien afirmó que “este partido será más difícil de los que hemos jugado. Antofagasta viene jugando muy bien y sabemos que es un partido trascendente para nosotros. Todo jugador quiere salir campeón y jugar con este marco de público. Es importante afrontar el partido como una final”. 

Hoy, más que nunca, se necesita el apoyo del hincha que lleva a Colo Colo en el corazón. Estamos a solo seis puntos de colocar un nuevo trofeo en nuestras vitrinas y su aliento es el ingrediente que necesita este equipo para terminar la jornada con un buen sabor de boca.

En el Monumental se respira calma. Colo Colo enfrenta a Antofagasta en la penúltima fecha del campeonato, la que incluso podría darles su estrella número 32, pero a los jugadores se les ve tranquilos y seguros. Saben que el encuentro de este domingo será crucial en el desenlace del torneo y no se desesperan.

Julio Barroso camina por los rincones del sector Arica, donde se ubica la Garra Blanca, como un verdadero dueño de casa. Sonríe y saluda sin problemas a quienes le estrechan la mano. Se toma un minuto para mirar el gramado de la cancha central y de inmediato comienza a recordar lo que tuvo que hacer para estar hoy aquí, en Colo Colo.

¿Qué significó llegar a esta institución? 

“Cuando llegué a Chile, uno de los objetivos que me planteé era llegar a un equipo grande. Uno nunca debe que perder la ilusión, a mí me costó demasiado, fue una vuelta larga la que tuve que dar, y por ahí hubiese preferido llegar mucho antes y tener más tiempo de disfrutar en Colo Colo, pero por lo menos llegué”.

Estás a un paso de otro título, ¿se vive de la misma forma que el que conseguiste cuando llegaste en 2014?

“Ese significó mucho, fue un momento muy especial en mi carrera. Marcó mi convencimiento interno de querer ser campeón siempre. Nunca olvidaré la primera conferencia de prensa cuando llegué a Colo Colo y dije que venía a ser campeón. Creo que la mejor manera de ratificar si eres de verdad en tus palabras, es demostrándolo. Ahí comenzó una etapa donde pudimos estar cada año más cerca del éxito que de la derrota, ya que hemos ganado 3 títulos en 3 años”.

En esos tres años han pasado varios jugadores por la defensa y Julio Barroso sigue jugando. ¿Te sientes importante para el equipo?

“Lógicamente, el pasar de los años te va dando esa importancia. No es que uno lo busque, porque lo principal es querer ser una ayuda al equipo. Pero llega un momento en el que empiezas a asumir diferentes responsabilidades, y los demás comienzan a depender mucho de lo que tú estás brindando al grupo. De a poco te vas transformando en un referente y hay que saber llevarlo”. 

¿Qué es lo que se conversa en la interna del camarín por la definición del campeonato que se están jugando?

“Se habla de que es el objetivo claro que nos planteamos desde el comienzo de temporada. Con lo hecho en el torneo anterior, donde el arranque fue difícil y al final casi lo remontamos, agarramos un envión para este año. Así que la obligación es ganarlo. Desde el principio se conversó del compromiso que debía existir, tuvimos altibajos pero sabemos que debe terminar así como lo planteamos desde el inicio”.

¿A qué crees que se debieron esos altibajos?

“Tuvimos un equipo en las primeras cinco fechas casi de memoria. Después, producto de las lesiones, tuvimos que improvisar y empezar a cambiar. Se nos lesionaron jugadores que nosotros sabíamos que eran importantes, y no es fácil para los que están afuera ponerse la camiseta y adaptarse tan rápido cuando ya hay una base armada. No tener esos jugadores nos pasó la cuenta pero, más allá de todo, lo extraordinario es que nosotros perdimos la punta solo una vez y eso marca que hemos sido muy fuertes”.

Cuando perdieron el liderato del torneo ¿el grupo estaba convencido que volverían a ser punteros?

“Es lógico, nosotros partimos desde la convicción de ganar y eso nos hizo superar dificultades y adversidades. Sabemos que siempre se pueden presentar pero hay que saber esquivar esos imprevistos. Nosotros sentíamos la convicción y fuimos a buscar la punta. Nosotros perdimos una vez con Iquique y, de ahí, estuvimos siempre liderando 13 fechas”.

¿Sientes que el campeonato ha sido irregular?

“Esas son opiniones, yo considero que ha sido un campeonato parejo donde se han ganado todos contra todos y nosotros hemos sabido marcar diferencias”. 

En ese sentido, ¿crees que nivela hacia arriba o hacia abajo este torneo?

“Se ha demostrado que en verdad los equipos que se proponen, pueden pelear el campeonato. Hasta esta fecha hay equipos que, matemáticamente, aún pueden pelearlo. Le hemos ganado a todos los equipos que están allá arriba, salvo Iquique y el empate con la U. Para mí es parejo y todo depende de la línea que ponga cada uno.  Sucede que, si lo gana Colo Colo, fue un campeonato mediocre. Y si lo gana la U, fue extraordinario, es una locura”.

Los equipos de Pablo Guede son vistos como ofensivos pero a Colo Colo le han convertido solo un gol de local en este campeonato. ¿A qué se debe eso?

“Él logró una mezcla ideal, por algo somos el equipo más goleador y al que le han hecho menos goles, junto con la U. Claramente eso marca que encontramos el equilibrio, yo lo veo así. Después  se discutirá si jugaste bien o mal pero, respecto a lo demás, hemos sido muy sólidos este torneo”. 

¿La defensa de Colo Colo es la mejor del campeonato?

“Hay que demostrarlo cuando esto concluya. Si somos la defensa menos goleada al final, es porque fuimos los mejores. Por ahora somos los mejores pero debemos terminar consiguiendo el campeonato, que es lo más importante”.

¿La diferencia sobre la U la podrán mantener?

“Tenemos la convicción clara de hacerlo. Hay que demostrarlo el domingo ante Antofagasta y en el caso de que nos toque otro partido, lo confirmaremos después con Cobresal”.

¿Estarán pendiente del partido que se jugará en paralelo?

“No, no nos preocupa la U. Debemos hacer nuestro trabajo, como dependemos de nosotros solo nos interesa ganar, eso es lo que importa”.

¿Quién saldrá campeón de este torneo?

“Lógicamente Colo Colo, no pienso en otra cosa y Dios dirá que sucederá”.

Hasta la fecha, Colo Colo es el único equipo chileno que ha logrado tocar el trofeo más codiciado e importante de América: la Copa Libertadores. Sin embargo, han pasado 26 años desde aquella hazaña y el cuadro Popular cree que ya es hora de ir a pelearla nuevamente, más aún por la dolorosa eliminación contra Botafogo en la edición 2017.

Por ello, el Cacique ya piensa en jugarla el siguiente año. “Tenemos que salir campeones para competir de buena manera en la fase de grupos de la Copa Libertadores 2018”, dijo hace unos meses Pablo Guede.

Siendo campeones, los albos lograrían el puesto de Chile 1 en la competición sudamericana, pero, de no ganar el título, también tiene opciones de llegar a copas internacionales. 

Si el elenco de Macul asegura la segunda ubicación en la tabla de posiciones del Clausura 2017, se adjudicará uno de los ocho cupos que entrega la Conmebol al campeonato chileno para disputar un torneo continental, ya sea la Libertadores o Sudamericana.

Según el reglamento de la ANFP, el sublíder del primer semestre tendrá el derecho de disputar el duelo entre subcampeones contra el equipo que salga segundo en el Torneo de Transición 2017. El ganador de este compromiso irá como Chile 4 a la competencia de clubes más grande del continente, mientras que el perdedor será el Chile 1 de la Copa Sudamericana del próximo año.

Cabe destacar que el Chile 4 no ingresará directo a la fase de grupos, por lo que tendrá que jugar una ronda previa para entrar a la instancia de los 32 mejores equipos del continente. Colo Colo quiere su revancha en el plano internacional y espera que este fin de semana asegure no solo su título nacional, sino que también un cupo en la Copa Libertadores 2018.

Esteban Paredes es un ejemplo claro de que los años no son excusas para tener un buen rendimiento en el fútbol. A sus 36 años, el delantero albo ha demostrado ser un jugador vigente en el campeonato nacional y que marca la diferencia en nuestro país a punta de goles, asistencias y liderazgo.

Sus números en el Torneo de Clausura 2017 son brutales. El Tanque acumula nueve goles en trece cotejos, siendo el segundo máximo artillero de la competición, superando extensamente su registro anterior del Apertura 2016, en el que anotó solo dos goles en la misma cantidad de partidos.

Es más, siete de sus dianas fueron convertidas en el Estadio Monumental, las que se suman a las dos anotadas con la camiseta de la Selección Chilena contra Venezuela en marzo pasado, demostrando que los aires de Macul le vienen bien a Visogol.

Sin embargo, el “7” del Cacique no solo sabe romper redes con esta camiseta, sino que también ha aportado con ocho asistencias para que el Popular se alce en la primera ubicación con 25 puntos y esté rozando su estrella 32.

Cabe destacar que el Bendito del Área es el único miembro del plantel que ha disputado todos los partidos de Clausura y es el jugador del Eterno Campeón que más minutos acumula en el campeonato con 1.130 minutos de 1.170. En resumen, un campeonato de lujo para nuestro capitán.

COLO COLO ES CAMPEÓN SI…

• Gana sus dos próximos partidos.
• Gana solo un pleito y la U no suma más de  cuatro puntos.
• Obtiene cuatro puntos y la U no gana sus dos encuentros. 
• Empata sus dos duelos y la U no suma más de dos puntos
• Suma un punto y la U no logra más de una unidad. 
• Pierde los dos partidos, la U no suma puntos y los otros equipos no acumulan más de cuatro unidades

DATO IMPORTANTE

• La única forma en que Colo Colo sea campeón esta fecha es derrotando a Deportes Antofagasta y QUE la U pierda su partido. 
• Si dos equipos igualan en la primera posición, deberán enfrentarse en un partido de definición. 

El Campeonato Nacional del año 1996 era crucial para Colo-Colo. Tras dos años en los que el archirrival se había quedado con los honores, el “Cacique” se había armado para recuperar la corona y poner las cosas en su lugar.

Por eso, llegaron nombres importantes como el brasileño Emerson Pereira y José Luis Sierra, entre otros. A ellos se sumaba Ivo Basay, quien se había incorporado unos meses atrás. Además, se apostó por un técnico como Gustavo Benítez, quien ya venía dándole forma a un equipo que tenía como único objetivo ser campeón. 

Y en las primeras fechas, los Albos demostrarían que estaban para grandes cosas. De hecho, hasta la décima jornada mantuvieron el invicto, exhibiendo un enorme poder ofensivo, prueba de ello es que hasta la primera derrota, el promedio de gol fue de 2,4 tantos por duelo.

Sin embargo, dentro de toda esta maravillosa campaña, uno de los duelos más complejos fue el de la fecha 7 contra Antofagasta en el Monumental. Ante casi 30 mil personas, Colo-Colo venció por 2-1, pero con muchas complejidades.

Ivo Basay abrió la cuenta recién a los tres minutos de partido con un tremendo zurdazo. Pero de ahí en más los “Pumas” jugaron sin complejos y empezaron a llegar con peligro, aunque sin lograr la igualdad. 

Por eso, el golazo de Emerson Pereira, a los 56’ fue festejado con todo. El brasileño sacó un derechazo desde treinta metros para aumentar las cifras. Pero nueve minutos después, Sergio Vásquez consiguió el descuento. Ahí, nuevamente creció la visita, pero la sólida zaga del “Cacique”, encabezada por Marcelo “Rambo” Ramírez, aguantó y terminó sentenciando la ventaja final, para un equipo que terminaría obteniendo el merecido título.